COQUI COQUI
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Así empezó todo... Durante la colonización del Nuevo Mundo, los monjes franciscanos españoles instalados en la península del Yucatán se dedicaron a recoger flores, maderas y hierbas exóticas junto a los indígenas mayas. Encontraron muchas especies, crearon un gran catálogo botánico e inventaron aguas de colonia, emulsiones y lociones a base de perfumes y aceites esenciales que durante casi 300 años perfumaron al gran imperio español. Años después, la Guerra de las Castas en el territorio mexicano hizo que este arte se perdiera.
Pero pasó el tiempo… y, hace unos años, el modelo, arquitecto paisajista y perfumista Nicolás Malleville, que había leído estas historias en las bibliotecas de los jardines de Kew (Inglaterra), de Bagatelle (París) y de Hanbury (Italia), decidió embarcarse en un viaje al Yucatán con el objetivo de recuperar las viejas fórmulas de los monjes y fusionarlas con el legado de la antigua medicina maya.
Después de varios años de investigación, Nicolás fundó Coqui Coqui Perfumes, un pequeño laboratorio en la ciudad mística y colonial de Valladolid, y algo después una serie de pequeños hoteles que se asemejan más a residencias privadas decoradas con gusto exquisito en las localidades de Mérida, Valladolid, Cobá y Tulum.
Pero pasó el tiempo… y, hace unos años, el modelo, arquitecto paisajista y perfumista Nicolás Malleville, que había leído estas historias en las bibliotecas de los jardines de Kew (Inglaterra), de Bagatelle (París) y de Hanbury (Italia), decidió embarcarse en un viaje al Yucatán con el objetivo de recuperar las viejas fórmulas de los monjes y fusionarlas con el legado de la antigua medicina maya.
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| Nicolás Malleville, retratado por Matt Albiani para Mr. Porter |
Después de varios años de investigación, Nicolás fundó Coqui Coqui Perfumes, un pequeño laboratorio en la ciudad mística y colonial de Valladolid, y algo después una serie de pequeños hoteles que se asemejan más a residencias privadas decoradas con gusto exquisito en las localidades de Mérida, Valladolid, Cobá y Tulum.
COQUI COQUI MÉRIDA
Coqui Coqui Mérida es la más joven de las residencias, pero derrocha carácter por la vibrante vida de la ciudad y el maravilloso edificio de 1903 en que se asienta. Una atmósfera decadente Belle Époque impregna la tienda, con sus perfumes y artesanías locales de gama alta; el bar-restaurante L’Épicerie, situado en el jardín del patio trasero, con olor a café recién hecho y el colorismo de sus platos gourmet; las maravillosas suites; y su opulento spa urbano.
COQUI COQUI VALLADOLID
Este Coqui Coqui ofrece un ambiente casi monacal en un edificio del siglo XVI que alberga además su perfumería insignia, repleta de sus fragancias, cremas, aceites y velas artesanales. Las habitaciones dan sobre un hermoso jardín botánico con una pequeña piscina de agua dulce, mientras que los tratamientos de su spa añaden un plus tranquilizador en esta ciudad de vida sosegada en la que eligió vivir San Bernardino de Siena.
COQUI COQUI COBÁ
Coqui Coqui Cobá desata al explorador que todos llevamos dentro. No hay nada comparable a este remanso de paz en medio de la selva, a los bordes de una laguna, y junto a una ciudad en ruinas con impresionantes pirámides mayas. Su atmósfera salvaje y misteriosa invade las suites, el bar-restaurante, el fabuloso spa con enfoque holístico, la biblioteca y, cómo no, la perfumería.
COQUI COQUI TULUM
Los cocoteros y las playas de arena blanca de Tulum fueron la inspiración para el nacimiento de esta nueva experiencia hotelera. Rodeado por la selva y el mar Caribe, Coqui Coqui Tulum fue creada en 2003 y refleja el estilo neo-rústico esencial en esta cadena; aquí, en concreto, a través de un diseño muy influenciado por la arquitectura local y las ruinas cercanas, tanto en las habitaciones, como en el bar-restaurante enclavado en la playa, en el spa y en la tienda.
