La Casita de la Planta: el hotel ‘boutique’ de Amaya Arzuaga

El primer hotel ‘boutique’ de la Ribera de Duero nos sorprende en el casco urbano de Quintanilla de Onésimo (Valladolid). Es obra de la diseñadora Amaya Arzuaga, que apuesta -como en su ropa- por la simplicidad y la vanguardia. 

LA CASITA DE LA PLANTA

www.lacasitadelaplanta.com

Aunque por fuera su aspecto responde a los cánones de la arquitectura tradicional, una vez dentro se respira innovación. Y no sólo desde el punto de vista estético, sino también de planteamiento. El hospedaje puede ser a la carta, adaptado a las preferencias y necesidades de los huéspedes, que pueden decidir cómo quieren que sea su estancia: si convencional por habitaciones, reservándolo por plantas o al completo.

Sin tantas pretensiones como el hotel Arzuaga -que se encuentra en la bodega familiar, a tan sólo 12 kilómetros- mantiene el concepto 5 estrellas en sus 33 habitaciones, pero a unos precios muy suaves: la doble estándar tan sólo cuesta 45 euros. 

Su nombre se debe al de la finca en la que la familia Arzuaga cultiva los viñedos de su vino más famoso. Y, nada más entrar, se palpa el estilo de la diseñadora a la hora de elegir los muebles, la iluminación, los objetos decorativos o los murales de papel pintado.

En las habitaciones, por ejemplo, reinan los colores negro y blanco, combinados con originales cabeceros y divertidas lámparas de sobremesa. Y en el hall, el salón con chimenea, el comedor o la bodega, el negro también hace su aparición revistiendo paredes, techos o suelos.

Dos de nuestros espacios favoritos son el comedor, con originales lámparas, sillas Thonet, cuadros de animales y piezas vintage, y el bar, con lámparas de bombillas colgando del techo, taburetes industriales y sillas metálicas.

Lógicamente, los huéspedes tienen a su disposición el paquete enoturístico de Bodegas Arzuaga, con sus catas y visitas a la bodega, viña y finca, así como tratamientos de vinoterapia en su spa.