Aunque Como y Maggiore son los lagos que se llevan la fama, Orta, otro pequeño lago del norte de Italia, transmite algo de melancólico, misterioso y etéreo. Presidido por la enigmática isla de San Giulio con su monasterio, sus tranquilas orillas boscosas esconden apacibles pueblos medievales, un relajante beach club, un hotel de cuento de hadas (ideal para ir a cenar o tomar una copa)... y uno de los bed & breakfast más encantadores de todo el Piamonte.
AL DOM
En el corazón del pueblo medieval de Orta San Giulio, Al Dom ocupa un edificio de finales del siglo XVIII completamente restaurado. Tras atravesar su jardín con tumbonas frente al lago, su vestíbulo, con muebles antiguos y azulejos artesanales, ya anticipa el estilo de lo que albergan el resto de las estancias: un acogedor comedor con chimenea donde se sirve a diario el delicioso desayuno, un recoleto patio invadido por macetas, y cuatro habitaciones con balcones y vistas de ensueño.
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| VISTAS DEL LAGO DE ORTA QUE NUNCA SE OLVIDAN |
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| EL VESTÍBULO, CON AIRES PALACIEGOS |
Muchos de los elementos originales del palacete se han conservado, como las ventanas y puertas de hierro forjado y madera, o los suelos de baldosa y parqué rematados por alfombras orientales. Además, su propietario ha añadido, por aquí y por allá, muebles y piezas antiguas, como la preciosa alacena para guardar la vajilla que es en realidad un mueble de mercería de 1950.
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| TELAS EN OCRES, AZULES Y ROJOS |
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| CHAISE LONGUE JUNTO A LA BIBLIOTECA |
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| ACCESO AL COMEDOR |
Ahora, en el buen tiempo, no hay nada comparable a sentarse a tomar una copa en el jardín, a la sombra de camelias, arces y alcanfores, a tumbarse en la terraza sobre el agua, o a subirse en la canoa que hay a disposición de los huéspedes para recorrer el lago.
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| RELAX A ORILLA DEL LAGO |
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| MUEBLES CLÁSICOS Y SOBRIOS |
Las cuatro habitaciones (dos dobles y dos suites) te harán sentir en las nubes. Con sus suelos de parqué antiguo o de granos de mármol, sus estilosos muebles y sus escogidos cabeceros, su nevera y set de té y café… todo invita a relajarse y descansar de la actividad del día.
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| HABITACIONES LUMINOSAS CON VISTAS DE ENSUEÑO |
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| UNO DE LOS CUARTOS DE BAÑO, CON SU TOQUE ROMÁNTICO |
ORTA BEACH CLUB
A menos de un kilómetro Al Dom y con un ambiente muy playero, dispone de tumbonas y sombrillas, hidropedales y kayaks, un bar cómodo y elegante para degustar bebidas, platos fríos y helados, y un restaurante que a partir de la puesta de sol se acompaña de música suave y se ilumina con antorchas y velas.
VILLA CRESPI
El edificio data de 1879, cuando el comerciante de algodón Cristoforo Benigno Crespi se inspiró en la arquitectura de Bagdad para construir aquí su villa privada. Rodeados de exuberantes jardines, los interiores también se asemejan al palacio de un pachá, con arabescos de estuco, columnas de mármol, muebles de época… Es hotel desde 1999, fecha en que el famoso chef Antonino Cannavacciuolo lo convirtió en un punto de referencia para la hospitalidad y gastronomía italiana. Su restaurante tiene dos estrellas Michelin y su menú degustación Carpe Diem (95 euros) es en realidad un embriagador viaje culinario.
