Acabo de volver de Fez con miles de imágenes todavía en la retina tras haber visitado los riads que, a
mi juicio, mejor reinterpretan la decoración y atmósfera típicas marroquíes. Entre los cientos
de pequeños hoteles que pueblan su medina, he hurgado y hurgado hasta descubrir los que destacan por un gusto exquisito.
LE JARDIN DES BIEHN
Catherine y Michel Biehn han restaurado con muchísimo
encanto este palacio de verano de un
pachá. Nada más atravesar la puerta de entrada quedé sobrecogida por su inmenso jardín andaluz, escoltado
por paseos de zelliges, arroyos y estanques, que me recordó la exuberancia de una jungla tropical y
a la vez el sosiego del huerto de un cura. De día huele a romero, verbena, geranio, rosa, flor de
naranjo… y, al anochecer, a dama de noche, gardenia y brugmansia.
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| Un oasis vegetal en el corazón de la medina |
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| La fachada del riad con sus tonalidades ocres y turquesas |
Entre los
árboles centenarios y cientos de especies botánicas, sobresalen también algunas
plantaciones de hierbas aromáticas, verduras y frutas que Driss, el jardinero,
cuida amorosamente antes de llevarlas a la cocina. Allí, el chef Hicham Moufid prepara deliciosos platos para
servirlos en el colorista Fez Café, que presenta en su carta de pizarra una
cocina actual y ligera: el agua de rosas se combina con el azafrán, la
berenjena con el cordero, la miel con el albaricoque, el pichón con el
membrillo… Refleja todo lo que venía buscando: ese arte de vivir a la oriental
que permite morder un higo maduro, todavía caliente por el sol, o pringarme los
dedos con una salsa perfumada con especias hasta entonces desconocidas.
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| Mesas y sillas pintadas en verde esmeralda |
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| Camas turcas para descansar en la sobremesa |
Me dirijo hacia la habitación –en total dispone de 5 suites
y 4 dobles completamente diferentes- acompañada por el vuelo en lo alto de golondrinas,
cigüeñas, pichones, palomas y mirlos, el murmullo de las fuentes, y la llamada
a la oración de los muezzines. Allí descubro antigüedades y preciosas telas,
sábanas bordadas en algodón egipcio, productos cosméticos en el cuarto de baño
a base de aceite de argán, la benéfica ausencia de televisión, una cafetera Nespresso,
un pequeño refrigerador para mantener las bebidas frescas… y unas preciosas
babuchas como regalo de bienvenida.
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| Atmósfera acogedora y bohemia en las habitaciones |
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| Genial composición para encima de la cama |
Al caer la tarde me acerco hasta “Le Bain Maure” para
someterme al ritual del hammam. Para los que no lo sepan, consiste en un baño
de vapor perfumado a la lavanda, limpieza a fondo con jabón negro y henna
neutra, exfoliación con un guante keess, hidratación con una crema que contiene
rhassoul y flor de hibisco, e instantes finales de relax con un té a la menta.
¡He descubierto el paraíso!
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| En "Le Bain Maure" te vuelves adicto al hammam... |
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| Qué difíciles son estas mezclas y qué bien quedan aquí |
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| No te pierdas su "boutique" con piezas únicas a la venta |
PALAIS AMANI
Este palacio histórico, de atmósfera íntima y discreta,
sobresale por sus ambientes puros y sobrios, por su atmósfera contemporánea y
relajante. Me impresionaron su salón, biblioteca, terrazas, hammam tradicional
y spa con tratamientos, así como su jardín con plantas aromáticas y cítricos.
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| Su patio con fuente al caer la noche |
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| Un entorno único para cenar |
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| Alfombras bereberes junto a muebles contempráneos |
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| Butacas actuales junto a viejas mesas de cobre |
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| El hammam preparado para el ritual del baño |
Además, su bar en la azotea resulta perfecto para disfrutar de un té
a la menta o de un cóctel ligero dejándose acunar por la efervescencia de las
calles, unos metros más abajo, mientras que las 14 habitaciones y suites, todas
diferentes, aseguran el mejor de los descansos.
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| Las habitaciones dobles, sobrias y acogedoras |
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| Una de sus inmensas suites |
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| Inclinación por el gris y el granate |
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| El colorista bar que da paso a la azotea |
PALAIS BAHIA
Edificado en 1700, esta antigua residencia de las mujeres de
la corte de un pachá ha conservado intacta la mayoría de sus tesoros
arquitectónicos, y quizá con un toque más femenino que otros establecimientos. Sus habitaciones y suites mezclan sabiamente el arte marroquí
con objetos contemporáneos y antigüedades de diferentes épocas.
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| El increíble corredor de la última planta |
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| La habitación azul es mi preferida |
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| Las habitaciones siguen el ritmo de la antigua distribución de la casa |
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| Vidrieras de colores y terciopelos llamativos |
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| Cuarto de baño en tonos marfil |
Cuenta además con piscina, hammam y spa, bar en azotea (las vistas cortan la respiración...), y un
restaurante que sirve platos marroquís, españoles e italianos, regados afortunadamente
con vinos locales e internacionales.
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| La piscina con su original cascada |
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| Zona lounge en la azotea |
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| Desayuno frente a la medina cuando el tiempo lo permite |
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| Su restaurante... absolutamente espectacular |
RIAD LAROUSSA
Qué impresión da entrar en este palacio del s.XVII que a finales del XIX
perteneció a Mehdi Mnebhi, ministro de guerra del sultán Moulay Abdelaziz, para
transformarse posteriormente en escuela coránica. Su nombre rinde homenaje a
Gaetano La Russa, antepasado de su actual propietario, Fred Sola, que emigró
desde Palermo al norte de Marruecos hace dos siglos.
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| El patio con su fuente y naranjos |
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| El ambiente indescriptible de la terraza de la azotea |
Alrededor de su imponente patio con naranjos se reparten
varias habitaciones y suites –algunas con chimenea y cuartos de baño de
tadelakte-, un fabuloso spa con hammam, un sofisticado restaurante que presenta cocina fassi animada con vinos de
Meknes, y una terraza alucinante que domina la medina.
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| Una de las habitaciones que se decanta por las tonalidades anaranjadas |
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| Otra de las habitaciones, con un aire más masculino |
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| Algunas disponen de zona de estar |
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| Su Spa es uno de los más apreciados de la ciudad |
ALGILÀ FES
Esta propiedad árabe, renovada al más puro estilo moresco, agrupa
en realidad tres mansiones interiores en las que han aportado su toque los mejores
artesanos de la ciudad: decoraciones en yeso, alfombras bereberes, maderas
cinceladas, azulejos, vigas a la vista, paredes pintadas con pigmentos
naturales…
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| Hay que asomarse a los patios para descubrir toda su belleza |
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| Candiles de bronce y fuente con pétalos de rosa |
Sus 12 habitaciones y suites se reparten por tanto alrededor
de tres patios con palmeras, fuentes y salones, mientras que la terraza brinda
su espacio para los desayunos y cenas. Su servicio de masajes a base de aceites
de argán, rosa y flor de naranjo te transportará al séptimo cielo...
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| Camas con baldaquino de vistosas telas |
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| Las paredes, estucadas con grandes rayas |
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| Habitación duplex con zona de estar en la parte de arriba |
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| Original mezcla de estilos en la vajilla |
RIAD MAISON BLEUE
En la mansión que en el s.XIX perteneció a Moulay Ver Arbi
El Alaoui, eminente juez y profesor de teología, y posteriormente al filosófo
Aziz Lahbabi, y propiedad ahora de la familia El Abbadi, se descubren tres
casas conectadas interiormente que siguen el gusto marroquí con influencias
modernas.
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| Destellos nostálgicos en su patio con piscina |
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| Velones, viejos instrumentos, cuencos artesanales... por aquí y por allá |
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| Rincones mágicos |
Nada más llegar al patio principal, con piscina y un jardín
de palmeras y mandarinos, te ofrecerán un cuenco de leche aromatizada a la flor
de naranjo y dátiles rellenos de almendras. Las 18 suites se distribuyen entre
éste, otro patio con antiguos astrolabios, y galerías con techos esculpidos en
madera. La casa azul también dispone de dos terrazas con piscina,
restaurante de cocina marroquí, un bar lounge, y spa y hammam en su casa
hermana, La Maison Bleue.
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| Las habitaciones se decantan por una estética más moderna |
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| Atmósfera romántica en el restaurante |
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| Salones relajantes con telas neutras |
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| El hammam con sus camas de mármol |
Conozco el hotel Jardin des Biehn y puedo confirmar que es tal como se describe en la reseña y el hammam muy recomendable. Fez es un destino muy interesante, pero la selección de hoteles que aqui se presenta lo hace todavía más apetecible.
ResponderEliminarExcellent list and highly recommended the accommodations that appear in it
ResponderEliminarthanks for your words Michael. I hope you enjoy them!
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