En la milla de oro de la Costa del Sol, rodeado de campos de golf y con vistas al mar y la montaña, se esconde un
hotelito de lujo tranquilo y con encanto. Tras atravesar un jardín de plantas tropicales y mediterráneas, entramos en este universo de estilo boho chic…
Su propietaria, la decoradora
Marie-Helene Burot, ha sabido recrear esa sensación de hogar (que se echa mucho en falta en los hoteles impersonales…), tanto en las
4 suites de la casa principal como en las
6 casitas de lujo adyacentes, recurriendo a su imaginación, a su pasión por la pintura y a sus viajes.
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| LA HABITACIÓN MILENA |
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| LA HABITACIÓN VALERIA |
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| LA HABITACIÓN MELISSA |
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| LA HABITACIÓN ALEXANDRA |
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| CUARTO DE BAÑO DE LA HABITACIÓN JACQUES |
Cada casita es independiente -tiene su propio patio o reducto de jardín-, ha sido diseñada con ese delicado sabor del estilo rústico chic francés, lleva el nombre de algún miembro de la familia, y está equipada con una pequeña nevera y vajilla, TV, reproductor de DVD, café y tetera, y una botella de cava. En la casa principal, igualmente armoniosa y apacible, los huéspedes pueden sentarse en la sala de estar para tomar una copa, leer un libro o charlar con otros clientes.
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| TERRAZA PRIVADA DE UNA DE LAS CASITAS |
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| RINCONES PARA SABOREAR EL AIRE LIBRE |
La
piscina de agua salada se resguarda entre palmeras y plantas exóticas, en una atmósfera especialmente propicia al relax. Además, el hotel cuenta con una excelente masajista y una profesora particular de yoga. Y, pensando en los más dormilones, el desayuno se sirve cada mañana desde las nueve hasta la una en un sombreado patio junto a una fuente presidida por un silencioso buda.
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| LA PISCINA CON SU VERANDA DE MADERA |
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| AL FONDO... EL MEDITERRÁNEO |
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| CAMAS BALINESAS EN EL JARDÍN |
